Ya ha transcurrido
una semana desde el inicio de la competición, y todavía no hemos podido leer
una buena noticia, más allá de los buenos números de Deron, Barnes o Matthews
en algún partido. La primera buena nueva, aunque no debería ni de ser noticia
si todo fuese normal, es el regreso de Nowitzki esta noche.
Ausente en las
dos derrotas frente a los Rockets, donde los de Carlisle (que nunca ha empezado
0-4) le echaron demasiado en falta a la hora de tomar responsabilidades en
ataque, Dirk quiere seguir con las buenas sensaciones que dejó frente a los
Pacers y acercarse un poco más a esos 30.000 puntos que ya tiene a tan solo
487. Y si es con victoria mucho mejor.
No será tarea fácil
lograrlo, pues los Jazz (2-2) vienen de ganar anoche a los Spurs en San Antonio,
posiblemente la cancha más complicada de la NBA. Aunque el factor B2B y las
bajas de Hayward, Burks y Diaw, la restricción de minutos de Favors y el
cansancio que acumularán veteranos como George Hill o Joe Johnson que jugaron
más de 32 minutos ayer deberían ayudar a los Mavs, no hay que fiarse.
Barea y Wes, que
arrastraban algunas molestias, estarán también esta noche en el Vivint Smart
Home Arena de Utah a partir de las 2 de la madrugada. El calendario de
noviembre parece una historia de miedo de un Halloween que parece que pueda
alargarse más de lo habitual para los Mavericks, esperemos enterrar los
fantasmas de la ansiada primera victoria hoy mismo.
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