Otra victoria que entra en la categoría "no fue bonito, pero cuenta igual". Los Dallas Mavericks vieron como los Wolves reducían una ventaja de 13 puntos a solo 4 en los últimos minutos del partido, pero supieron cerrar bien el encuentro y llevarse la victoria por 93 - 87.
Dirk Nowitzki fue el dueño y señor del partido, y los Mavs ganaron porque lo quiso él. Terminó con 29 puntos, 7 rebotes y una serie de 12/22 en lanzamiento. Es su mejor partido desde los 31 puntos y 11 rebotes contra los Clippers el 11 de noviembre, y es buena señal que haya llegado cuando nos acercamos al ecuador de la temporada. Durante la campaña pasada Dirk solo pasó de los 25 puntos en una ocasión después del 1 de enero, y tuvimos que esperar a Playoffs para verlo.
Además el alemán acumula cuatro partidos seguidos con 20 puntos o más. su mejor racha en ese sentido desde que encadenase siete entre enero y febrero de 2014.
37 años 206 días pic.twitter.com/Rvc5qCQ0p9
— Gonzalo Vázquez (@GVazquezNY) enero 11, 2016
Del resto Zaza Pachulia y Chandler Parsons fueron lo más destacable. Zaza llegó al descanso ya con un doble doble, pero en la segunda parte estuvo más desaparecido y terminó con 13 puntos y 11 rebotes. Parsons logró 14 puntos y 5 rebotes que en realidad pasaron desapercibidos, pero que coincidieron con los mejores momentos de los Mavs. A pesar de eso, Rick Carlisle lo sentó en los momentos finales en favor de Raymond Felton. ¿Explicación? Seguramente porque Parsons funcionó de maravilla con los suplentes + Dirk (J.J. Barea, Devin Harris y JaVale McGee), y no tan bien con los titulares. Carlisle tiene malabares que hacer para intentar corregir (o aprovechar) eso.
Deron Williams y Wesley Matthews estuvieron horrorosos en el lanzamiento, aunque aparecieron para meter canastas importantes en los últimos minutos. Barea estuvo bien (8 puntos, 4 asistencias), y Felton y McGee correctos. Dwight Powell quizás el más flojo, pero el emparejamiento (Nikola Pekovic o Karl-Anthony Towns) no era beneficioso para él.
Aunque no fuese bonito, era importante para los Dallas Mavericks llevarse la victoria. En los próximos siete días se enfrentan al peor tramo de cuatro partidos de la temporada. Primero recibirán en Dallas a los Cleveland Cavaliers, y después realizarán una gira de tres partidos por Oklahoma City, Chicago y San Antonio. Por las sensaciones cualquiera diría que los Mavs han terminado esta semana con balance 3-1. Veremos las que pueden arañar esta semana.
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