La Venganza de los Hornets
Dos días después de que los Hornets dejasen de ser el único invicto de la liga al perder con los Dallas Mavericks, los de New Orleans se tomaron la venganza en su casa, venciendo a los texanos por 97 a 99.
La victoria de los Hornets estuvo basada en la aportación conjunta de todo su quinteto, sumando entre los 5 titulares 79 de los 99 puntos de su equipo y no bajando ninguno de ellos de los 12 puntos. Los más destacados fueron Chris Paul con 20 puntos y 11 asistencias, David West con 17 puntos, 6 rebotes y un gran último cuarto y Emeka Okafor con 13 puntos, 10 rebotes y 2 tapones.
El encuentro sin embargo empezó siendo dominado por los Mavericks, alcanzando una buena renta desde el primer cuarto que lograrían mantener al irse al descanso 10 arriba. Pero los Hornets reaccionaron en el tercer cuarto y pasaron de perder 52-42 a ir ganando por 69-75.
Caron Butler jugó todo el primer cuarto en su retorno tras tres partidos sin jugar, pero después de eso jugó muy poco tiempo y con poco impacto en la cancha, notando posiblemente las consecuencias de haber estado una semana parado sin practicar deporte.
Deshawn Stevenson volvió a ser titular pese a la vuelta de Butler, y siguió demostrando su efectividad, anotando sus dos intentos de triple y realizando una buena defensa en sus 9 minutos de juego. JJ Barea por su parte volvió a contar con minutos importantes, pero pese a que consiguió aportar bastante en otras facetas del juego, sus porcentajes fueron pésimos, lo cual permitió que la defensa hornet le flotara en el último cuarto e intensificara la presión a Nowitzki, Terry y Kidd.
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El ese mismo último cuarto, con el marcador muy igualado, Jason Terry (16 puntos, 7 asistencias) y, sobretodo, Dirk Nowitzki (29 puntos, 9 rebotes) volvieron a cargarse a sus espaldas a los Mavericks para mantenerles en el partido. A falta de 3 minutos y medio, Terry anotaba un triple que volvía a poner a los Mavs 1 arriba. Pero dos canastas de Paul y West y un triple de Belinelli ponían a los Hornets 6 por delante (91-97) con tan solo 2 minutos por disputarse.
Los de Carlisle apretaron las cuerdas en defensa, pero aunque los Hornets solo anotaron dos puntos en los dos minutos restantes, no fueron capaces de culminar la remontada pese a tenerlo en su mano. A falta de 6 segundos y uno abajo en el marcador, Jason Kidd robaba un balón que le daba la bola de partido a Dallas, pero Dirk Nowitzki perdió el balón y los Hornets se llevaron el encuentro.
Sobre la pérdida de balón en la última jugada, Rick Carlisle y Dirk Nowitzki se reparten las culpas:
Rick Carlisle - "Lo de la última jugada fue por mi culpa. Tomo la responsabilidad de eso. Puse a Dirk en una situación muy complicada".
Dirk Nowitzki - "Simplemente fue un error mio en realidad. Cogí el balón muy lejos e intenté realizar un movimiento que no tengo en mi arsenal. La jugada estaba diseñada para que cogiese el balón más dentro, pero pusieron a Ariza que es muy largo a defender el saque y yo salí demasiado fuera. Intenté ir a la izquierda pero él (West) me lo impidió, y ahí normalmente hago mi giro, pero como dije capturé el balón demasiado lejos".
En cualquier caso, Dallas perdió. Pero no se puede negar que Mavericks y Hornets nos han brindado dos grandes partidos en apenas tres días. Y estos dos partidos, demuestran que la Conferencia Oeste y la SouthWest division en concreto será más dura aún si cabe esta temporada.
Próximo rival de los Mavericks: Chicago Bulls en Dallas el viernes.